lunes, 30 de noviembre de 2015

La vida es lo que tú tocas



" Tú vives siempre en tus actos.
Con la punta de tus dedos
pulsas el mundo, le arrancas
auroras, triunfos, colores,
alegrías: es tu música.
La vida es lo que tú tocas."

Pedro Salinas

domingo, 29 de noviembre de 2015

Abriendo puertas a la creación




De par en par, los combonianos de Granada nos abrieron las puertas de su casa para que nosotr@s pudiéramos abrir las puertas a la creación misma. Mil gracias. También a los LMC de la Zona Sur, cariñosos, con los que compartimos finde.

Soleados, el sábado y el domingo ( 21-22 de noviembre) nos encontramos el P. Daniel, la Hna. Marisela, Joaquín, Nacho, Tina, Ana y Mario… ¡Vaya!,  se me olvidaba Blanca, la gatita que apareció por allí cuando llegamos y que se quedó con nosotr@s toda la convivencia. Preciosa, cariñosa fiel, como la creación misma que nos rodea y abraza. “Laudato sí, mi Signore” “Alabado seas, mi Señor” cantamos juntos como en su día cantó San Francisco de Asís: “Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra madre tierra”.

La idea del encuentro era esa, poner los cinco sentidos en el cuidado de la casa común que nos propone el Santo Padre Francisco en su carta encíclica “Laudato Sí”. Naturaleza que Dios ha dejado en nuestras manos y que hemos llenado de trampas, en las que caemos nosotros mismos. Qué curioso, ¿verdad?

“Laudato Sí” es una invitación a que no se pierda ni un latido de vida, a no seguir condenando a los pueblos como Sud Sudan. Condenas de las que sólo nos puede liberar Jesús. El condenado, el que condenamos. Jesús nos asegura que es rey, y que tiene autoridad para resucitar y resucitarlo todo.

También estuvimos de acuerdo en que:

Somos eslabones de una misma cadena, que es la comunidad.
En que si hay desiertos interiores hay desiertos exteriores.
En que nos creemos libres, pero es una libertad de consumo.
En cuidar y respetar lo que nos rodea, empezando por nosotros mismos...

Y en que para cambiar el mundo hay que empezar por los pequeños gestos cotidianos.

Por último, Aitana, lmc, que formó parte de este camino de "Jóvenes en Misión" compartió su proceso de discernimiento y cómo acabó descubriendo que Dios la llamaba a realizar su vocación misionera como laica misionera comboniana.



Terminamos esta convivencia sorprendid@s  por lo bien representada que está nuestra forma de sentir la fe en esta Iglesia. Y si vemos a Dios en la naturaleza, pues quizá  no estemos tan mal encaminad@s.

Felicidades al P. Héctor que este lunes 23 de noviembre celebraba el 13º aniversario de su ordenación sacerdotal.

Mario

lunes, 16 de noviembre de 2015

Dalo todo



“Siento la necesidad de dirigir a vosotros en particular, queridísimos jóvenes, mi palabra para manifestaros una aspiración interior que desde hace tiempo tengo en mi corazón…

No os pido ahora vuestra limosna para las misiones. Os propongo algo mucho mejor. Si el Señor lo quiere, si lo sentís en vuestros corazones, os pido en nombre de Dios el sacrificio de vuestras vidas jóvenes, de vuestras inteligencias, de vuestras energías, de lo que más queréis y más deseáis. Es un gran sacrificio lo que os pido: que lo dejéis todo en nombre de Aquel que, para nosotros, lo ha dado todo" 

San Guido María Conforti.

En la foto, amigas y postulantes de las misioneras combonianas en Granada :)

sábado, 14 de noviembre de 2015

Tú, nuestra PAZ



"Señor Jesús, Tú eres nuestra paz,
mira el mundo dañado por la violencia
y agitado por el miedo y la inseguridad.
Consuela el dolor de quienes sufren.

Da acierto a las decisiones de quienes nos gobiernan.
Toca el corazón de quienes olvidan que somos hermanos
y provocan sufrimiento y muerte.
Dales el don de la conversión.

Proteje a las familias, a nuestros niños,
adolescentes y jóvenes,
a nuestros pueblos y comunidades.
Que como discípulos misioneros tuyos,
ciudadanos responsables,
sepamos ser promotores de justicia y de paz,
para que en Ti el mundo tenga vida digna.

Amén"

viernes, 13 de noviembre de 2015

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Parte de un sueño



Desde hace al más de un mes estoy de experiencia comunitaria en San Lorenzo, un pequeño municipio del Norte de la provincia de Esmeraldas, en Ecuador.

Por su situación costera y su cercanía a Colombia, tiene una mezcla de población colombiana y afroecuatoriana (de hecho parece una pequeña África).Su gente es impresionante, bella, llena de vida... Con el ritmo propio de zona de calor y repleta de niños y jóvenes. Muchos trabajan en el ámbito de la educación, porque San Lorenzo está lleno de escuelas y colegios; muchos son pescadores y concheras, hay quien se dedica a la palma africana y otros trabajan en los pequeños comercios, en los taxis, peluquerías, etc.

Desde hace más de 50 años, la Misión Comboniana está presente aquí, tanto los padres como nosotras y se nota; por el trabajo hecho, por el cariño que la gente tiene a quienes han dado su vida por este pueblo y por todos los sueños comunes que aún nos quedan por vivir.

Me alegra formar parte de esta historia y de este sueño.

Doy muchas gracias a Diosito, como dicen por aquí, porque me están enseñando a ser "pia madre de la nigrizia".

Acordaos de nosotros.

Con cariño,

Bea (Novicia comboniana)


Abriendo puertas


Una puerta cerrada, de madera con un picaporte de metal. Nunca has estado allí, tiene cierto halo de misterio y no sabes si atreverte a bajar el picaporte y a tirar de la puerta. Tal vez una pregunta sea la más perseverante: ¿Qué se oculta para que haya una puerta opaca y cerrada? Otras preguntas te pueden atormentar ¿Habrá alguien? ¿Qué sorpresa aguarda? ¿Se esconderá algún peligro? Lo que hay al otro lado es totalmente incierto, el temor te puede dejar paralizado pero la inquietud y la curiosidad te incitan a descubrir ese secreto oculto. 

Al final puede que abras una pequeña rendija, una primera tentativa de esclarecer el misterio, pero aún hay poco campo de visión, abres un poco más la puerta, ya te vas sintiendo más seguro, todos necesitamos sentir que controlamos la situación. Y entonces, ante ti, se destapa el misterio, la inquietud y el temor dan paso a la sorpresa y la alegría, piensas “ha merecido la pena”. Podría ser el inicio de una novela o una película de fantasía, seguramente el protagonista fuera un niño, desbordante de curiosidad, que le espera una aventura llena de giros inesperados, de personajes que le van guiando o que le intentan engañar. Es el principio de un camino, con un final incierto.

El fin de semana 24-25 un grupo de seis curiosos nos dispusimos a abrir la Puerta de la Misión, la primera puerta de muchas que nos esperan este curso. Sin embargo, no estábamos solos, nos acompañaron la Hna. Marisela y el P. Daniel, junto con la Hna. Encarna y los LMC Isabel y Gonzalo. Cada uno fue dando su apoyo para ayudar a abrir la puerta, alentar o despertar la inquietud. Daniel nos introdujo a la exhortación apostólica del Papa Francisco, Evangelii Gaudium; Marisela nos habló sobre el mandato misionero; Isabel y Gonzalo nos guiaron en la oración invitándonos a ver nuestra Historia de Fe, nuestras puertas que ya hemos abierto; Encarna nos compartió lo que encontró al abrir su puerta de la misión, una puerta que le ha hecho abrir muchas otras viajando, aprendiendo y disfrutando por medio mundo. Por último, Ana Isabel, una de nuestras compañeras, nos habló sobre su experiencia en Benín, una puerta que abrió este verano. 

Cada puerta abre a un mundo diferente, y las sensaciones que a cada uno le inundan son únicas. Así lo define Ana: “Este fin de semana ha sido un regalo. Analizar el significado de la Iglesia como agente evangelizador a través de encíclicas del Concilio del Vaticano II, fue realmente interesante. Especialmente enriquecedores el testimonio de una misionera en Uganda y las reflexiones de los jóvenes del grupo. Me siento afortunada de tener un lugar donde compartir mi fe y la inquietud por la misión y cargar pilas para el día a día.”

Y es que, la sorpresa y la alegría que nos invade al abrir una puerta, nos mueven a compartir lo que hemos visto, queremos que más gente disfrute como nosotros hemos hecho. Y con  esa alegría, qué mejor celebración final que una misa común, y una mesa compartida.

Quién sabe si, al terminar el curso, podremos hacer nuestra novela de aventuras. ¿Te atreves a abrir la siguiente puerta?

Íñigo



lunes, 2 de noviembre de 2015

Confiar te hace vivir más



La marca que ha utilizado estas imágenes para lanzar su anuncio  dice que "confiar te hace disfrutar más".

Cada vez que lo veo, pienso en los momentos en los que me he dejado llevar por el soplo del Espíritu Santo, en los que me he montado "en el avión del Padre" y he disfrutado del viaje porque confié en su Amor y en la meta que me tenía preparada. La mayoría de las veces ni sabía el destino, pero eso no quitó que riera, que bailara, que corriera y saltara, segura de que "confiar te hace VIVIR más".
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