sábado, 2 de junio de 2018

Constructores de sueños


Desde pequeños venían marcados por el amor. / Detrás de su apariencia cotidiana / guardaban la ternura y el sol de medianoche”. Empezamos el encuentro con la oración, donde resonaron estas palabras de la poesía de Gioconda Belli Portadores de Sueños. Desde la cotidianidad de cada uno, nos juntamos un nutrido grupo en la casa de los misioneros combonianos en Madrid para reflexionar y compartir sobre el tema de este encuentro: “Jesús sigue llamando”. 

Ese llamamiento es la vocación, una vocación humana, cristiana y específica. La humana de amar y servir, a la que todos estamos llamados, la que nos hace ser humanidad. La cristiana, a la que somos llamados todos los que compartimos las enseñanzas de Jesús, vocación que tiene múltiples perfiles como laicidad, vida consagrada o sacerdocio, diferentes caminos para un mismo fin, y diferentes formas de realizar cada camino, realidad que pone de manifiesto la “pluriformidad” de la Iglesia. Y la vocación específica, cómo construir el Reino de Dios, aglutinando las dos vocaciones anteriores desde nuestras profesiones, en la cotidianidad.

La esencia pluriforme de la Iglesia se representa también en sus múltiples traducciones culturales, tuvimos el placer de escuchar al P. Miguel Ángel (misionero comboniano), que ha desarrollado gran parte de su misión en Filipinas. A través de él pudimos acercarnos un poco más a ese rincón tan rico y diverso.
P. Miguel Ángel en un momento de su testimonio

Si algo es la vocación, es un “estado permanente de misión”, como nos recuerda el Papa Francisco. Esa construcción permanente de los sueños comunes es la que nos lleva a tener las puertas abiertas y realizar la revolución de la ternura y del cariño. Como recordábamos en un momento del encuentro, “me toca a mí y de mí depende el que tus palabras no se pierdan”, nos toca a cada uno portar nuestros sueños, sueños compartidos, para ir construyendo entre todos y todas la utopía del mundo fraternal, recuperar ese Reino de Dios originario donde nos reconocemos como humanidad hermanada.
En un momento de la Vigilia
“Los llamaron ilusos, románticos, pensadores de utopías
dijeron que sus palabras eran viejas
y, en efecto, lo eran porque la memoria del paraíso
es antigua al corazón del hombre” G. Belli

Íñigo Vitón García

¡Vente al próximo encuentro!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts with Thumbnails